DOMINGO, 13 de enero 2019.- Epuyén quedó cercada por un brote de hantavirus. Diez personas murieron y hay otros 26 casos confirmados. Las autoridades decidieron preservar a sus habitantes para evitar que se propague. Una orden judicial dispuso el viernes el aislamiento preventivo de más de 85 vecinos de esa ciudad chubutense, a unos 1.700 kilómetros al sur de Buenos Aires.
«Todos los casos provienen de la misma cadena de transmisión epidemiológica», aclaró el secretario de Salud, Adolfo Rubinstein.
Así comenzó el brote fatal de hantavirus:
Todo se desencadenó por un paciente que ya tenía síntomas y fue a la fiesta de cumpleaños de 15 el 8 de noviembre del año pasado. «Contagió a muchos de los contactos que estaban en la fiesta y, a su vez, esas personas contagiaron a otras», explicó Rubinstein. Sin embargo, el funcionario intentó llevar tranquilidad al asegurar que «todos los casos están confinados a esa ciudad».
Además de las diez víctimas fatales y los 26 casos confirmados, hay 85 contactos de personas que tuvieron síntomas de la enfermedad y que ahora están «en completo aislamiento», según aclaró Rubinstein.
Habitualmente, el virus se transmite a través del contacto con la saliva, las heces y la orina de los ratones silvestres infectados, que una vez secas pueden ser inhaladas. Sin embargo, las autoridades no descartan la hipótesis de transmisión de persona a persona en el brote actual. Rubinstein explicó que se esperan los resultados de las muestras para confirmar o descartar esa posibilidad. «La letalidad observada en este brote es la esperada para la cepa Andes Sur de hantavirus (entre 30% y 50%)», agregó.
El virus, para el cual no existe vacuna ni tratamiento específico, afecta la función de los pulmones y el corazón. El juez de Esquel, Martín Zacchino señaló en su resolución: «Aquí no solo está en juego la salud de la población, sino también la vida de las personas, lo que torna a la medida no solo en proporcional sino también en lógica, razonable y absolutamente necesaria».
El magistrado ordenó asimismo al Ejecutivo cubrir adecuadamente las necesidades alimentarias, sanitarias y sociales de los aislados en sus hogares.
Las autoridades de Epuyén decidieron suspender durante 40 días reuniones de personas en instalaciones municipales y deportivas para evitar que más personas contraigan hantavirus.
Entre 2013 y 2018, hubo en la Argentina 111 muertos por hantavirus, con una letalidad del 18,6%.
Comentario de Facebook