LUNES, 26 de marzo 2018.- El Centro de Información de Alerta Temprana (CIAT) informó que se registró un pulso eruptivo en el volcán Copahue, generando la emisión de una columna de ceniza a una altura no superior a los mil metros y desplazada hacia el norte del cráter.
El proceso, que duró aproximadamente una hora, no generó alteración alguna en la localidad, manteniéndose todas las actividades con absoluta normalidad. Luego de este evento, el pulso eruptivo bajó su nivel de intensidad y dejó de emitir cenizas hacia el exterior.
Debido a esta información, obtenida por medio de los equipos de monitoreo, el Servicio Geológico Minero Argentino (Segemar-OAVV) y el Servicio Nacional de Geología y Minería (Sernageomin-OVDAS) de Chile establecieron el cambio del nivel de alerta técnica al volcán Copahue de verde a amarillo, mientras que la alerta del sistema de Protección Civil de la Provincia se mantiene verde.
No obstante, los organismos entendidos en la materia transmiten tranquilidad a toda la población, en tanto se mantienen en permanente comunicación con los servicios de monitoreo del volcán de los organismos de Segemar y OVDAS (Observatorio Volcanológico de los Andes del Sur), como así también con las defensas civiles de las localidades cercanas.
Asimismo, se indicó que el radio de exclusión al cráter del volcán se mantiene a 1,5 kilómetros, de manera preventiva, hasta el próximo reporte oficial.
No hay peligro latente para la población, advirtieron los organismos vinculados a la prevención de riesgos de la actividad volcánica al activarse la alerta amarilla en el Copahue.
Este color de alerta implica la actividad inestable del volcán. Ante la ocurrencia de este fenómeno, es normal que haya explosiones menores, aparición de fumarolas e incremento de los parámetros de monitoreo.
Los expertos recomiendan en estos casos mantenerse informados y evitar acercarse al volcán.
Los reportes en situaciones de alerta amarilla se deben producir de forma quincenal.
La última vez que el volcán Copahue activó una alerta amarilla fue en junio del año pasado. La situación volvió a la normalidad en septiembre.
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