LUNES, 6 de marzo 2017.- Luego de ocasionar un accidente vehícular, dos integrantes de la armada descendieron del auto, empuñando una de ellas un cuchillo, con el objeto de atacar a los ocupantes del otro automóvil.
Las agresoras circulaban en un rodado que colisionó contra otro en la intersección de Islas Malvinas y Combate de Montevideo. No respetaron el disco de “ceda el paso” y así y todo, enfurecidas, descendieron del automóvil. Una de ellas empuñaba un un cuchillo con el lanzó varios puntazos a las otras mujeres, ocupantes del otro auto.
Intervino personal policial uniformado y un efectivo de civil, quien sufrió un corte en una pierna, cuando redujeron a estas indeseables.
Luego de efectuar la requisa personal, constató que las violentas son personal de la Armada Argentina. Junto a ellas, también fue detenida una tercera que llegó al lugar a pretender entorpecer la labor policial.
Las violentas mujeres circulaban por calle Islas Malvinas en sentido descendente a bordo de un autoVolkswagen Fox, patente LSC 619, y sin respetar el cartel “ceda el paso” impactaron contra un rodado Fiat Palio de color rojo que circulaba por Combate de Montevideo, ingresando al acceso a ruta 3.
Intervinieron dos efectivos que llegaron en un primer móvil, reduciendo a las violentas mujeres, siendo ayudados por un tercer efectivo policial de civil de la división Servicios Especiales, Mariano Martínez, quien resultó lesionado de un corte en una pierna cuando logró desarmar a la más exaltada de estas mujeres.
La portadora del arma blanca fue identificada como Patricia Cárdenas Caicheo, mientras su acompañante fue identificada como Adriana Cardenas, confirmándose allí increíblemente que estas personas de semejante conducta son personal que integra las filas de la Armada Argentina.
Quedaron detenidas en medio del escándalo, y mientras eran trasladadas propinaron todo tipo de insultos contra el personal policial y las mujeres del otro automóvil.
Fue tal es escándalo, que se presentaron otros familiares de sexo femenino, parientes de las navales, quienes continuaron con las amenazas e insultos debiendo ser controladas por personal policial, que detuvo a una tercer mujer identificada como María Cárdenas.
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