JUEVES 27 de febrero de 2025.- La situación laboral en el sector de la construcción en Tierra del Fuego sigue siendo crítica, según lo manifestado por Julio Ramírez, secretario General de la Unión Obrera de la Construcción de la República Argentina (UOCRA) en la provincia. En declaraciones recientes, Ramírez expresó su frustración por la persistente desocupación en la región, señalando que «seguimos como siempre, con mucha desocupación». A pesar de la llegada de dos nuevas empresas que comenzaron a trabajar en el campo, la incorporación de solo 20 trabajadores no logra paliar la grave situación, que afecta a una gran parte de los trabajadores de la construcción.
«Las obras públicas están paradas totalmente, la verdad que es un desastre todo», aseguró Ramírez, apuntando a la falta de inversión y a la inactividad tanto del Gobierno Provincial como del Gobierno Nacional, que a su juicio son responsables de la situación. «No se está haciendo nada acá en la provincia, no se está moviendo nada. El municipio hace lo que puede, pero el Gobierno Provincial no puede empezar una obra», agregó, cuestionando si la falta de avances en proyectos clave, como el puerto, se debe a la falta de recursos o a la falta de voluntad política.
El secretario General también destacó que la desocupación en el sector supera el 80%, y a pesar de algunos intentos por parte de la Municipalidad de Río Grande de reactivar la economía local a través de obras menores con empresas pequeñas, el impacto sigue siendo insuficiente para revertir la crisis. «Tenemos un 20% de ocupación, y el 80% de los trabajadores que siempre estuvieron en la construcción están desocupados. No es que la gente se haya ido, nadie se fue, están todos acá, pero sin trabajo», explicó Ramírez, subrayando que la situación en la provincia es similar a la que se vive en otras regiones del país, donde la falta de inversión en infraestructura está afectando a miles de trabajadores.
El sindicalista también expresó su indignación por la falta de avances en proyectos que se habían prometido, como el puerto en Río Grande y estudios de suelo en Ushuaia, que según él siguen siendo solo promesas que no se concretan. «Se habla de estudios de suelo, pero no se empieza nunca nada. Queda todo en estudios de suelo, tenemos ingenieros haciendo estudios en todos lados, pero nadie invierte ni mueve un dedo», enfatizó.
Ramírez no ocultó su frustración por la situación económica general, mencionando que a pesar de las afirmaciones de que la inflación ha bajado, los trabajadores siguen enfrentando dificultades para acceder a lo más básico. «Escucho que la inflación bajó, pero lo que pasa es que no se puede comprar comida porque todo está carísimo. Claro que va a bajar la inflación si nadie compra nada», sostuvo, criticando duramente al Gobierno Nacional y calificando su gestión como «lo peor que tuvimos en los últimos años».
A modo de conclusión, Ramírez reiteró que la falta de respuestas por parte de las autoridades ha generado un clima de desesperanza entre los trabajadores de la construcción. «Tengo mucha bronca, porque te prometen cosas y al final no se hace nada. A nivel nacional no hay ninguna mira de que esto se componga, cada día estamos peor», finalizó el líder sindical, haciendo un llamado urgente a la acción para revertir la situación y reactivar la construcción en Tierra del Fuego.
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