LUNES, 9 de mayo 2016.-La reunión estuvo pautada para las 12 horas en la sede que ATSA posee en la esquina de Cabo de Hornos y Provincias Unidas en el barrio Chacra II de Río Grande. La organización del encuentro previó que los sindicalistas debían acreditarse para el ingreso a la reunión, función que estuvo a cargo del Dr. José Luis Álvarez, Subsecretario de Asuntos Gremiales; secundado por el Secretario de Gobierno, Alejandro Ledesma; y por el Secretario de Gestión Gubernamental, Juan D’angelo, dispuestos en una mesa al ingreso de la sede de ATSA; más atrás, en el ingreso al pasillo que permite el acceso al quincho, se encontraban dos efectivos policiales de civil para franquear el paso de quienes no estuvieran autorizados; lo que demuestra que ya había una intención de parte del Gobierno de que algunos dirigentes no ingresaran al cónclave.
El primer indicio de que a los dirigentes de la Unión de Gremios no se les iba a permitir el ingreso se dio cuando Diana Román, de la Comisión de Discapacidad de la CTA se le indicó que no estaba registrada y que debía esperar. Situación similar ocurrió con Norma Giglio de los Jubilados TDF, a quien se le respondió de igual manera que a Román, a pesar de que otro sector de jubilados ya se encontraba en la reunión representados por Patricia Blanco. Ninguno de los dos sectores de jubilados poseen documentación que los acredita como alguna organización, pero a Patricia Blanco se le permitió ingresar y a Norma Giglio no.
A la representante de AFEP, Nadine Calvo, también se le dijo que no estaba acreditada por solo tener inscripción en el derogado Registro de Entidades Sindicales de la provincia, a lo que la sindicalista respondió mostrando la Personería Nacional Nº 1.677 de la Federación Argentina de Trabajadores Estatales Provinciales, a la que la AFEP está adherida, quedando Álvarez en situación de “incomodidad” por desconocer la documentación que se le presentaba.
A María Gómez, Secretaria de Prensa del Sindicato de Enfermeros SUEF, se le negó el acceso a la reunión porque, según lo dicho por José Luis Álvarez, esa entidad ya estaba representada por el Secretario General Erasmo Villarroel (actual funcionario del Ministerio de Salud). Gómez, junto a un sector de Enfermeros, participan de la Unión de Gremios y acompañan el acampe en Río Grande
No hacía falta más nada para demostrar que el Gobierno no quería que la Unión de Gremios participara de la reunión; sin embargo, quedaba por ver la reacción de Álvarez cuando Horacio Catena intentara acreditarse él, y otros dirigentes como CTA Autónoma, y como Unión de Gremios.
Fue a partir de ese momento que comenzó un diálogo con sobrados fundamentos por parte de varios dirigentes sindicales para participar de la reunión, y de respuestas esquivas, sin fundamentos, incoherentes, falaces, por parte del Dr. Álvarez, que se extendió por espacio de dos horas aproximadamente.
En ese periodo, Álvarez, Ledesma y D’angelo se retiraron del lugar, fueron, vinieron, mostrando claramente que no sabían que hacer, que decir; incluso Álvarez pretendió que Catena firmada una notificación donde se le hacía saber porque no se los autorizaba a ingresar. Sandra Esperón (SOEM), Elisa Dietrich (APOC), Verónica Andino (SUTEF), Marcelo Levicoy (SADEM), María Gómez (SUEF); Horacio Catena (CTA-A), ente otros, hacían denodados esfuerzos para que Álvarez entrara en razón, y permitiera la participación de esos sectores gremiales. A esa altura de la tarde, lo de los funcionarios del Gobierno ya era un verdadero “papelón”; mientras, en el salón principal, el Dr. Gastón Díaz, Ministro de Gobierno, encabezada la reunión con otros gremios. En el interior, Catena quiso trasponer el límite de la mesa de acreditaciones para ir al baño, y D’angelo se le interpuso, al mejor estilo “patovica”, para que no pasara.
El Subsecretario de Asuntos Gremiales, Dr. Álvarez, dijo que los dirigentes que conformaban la “Comisión” y que estaban en la reunión, no querían que la Unión de Gremios fueran parte de la misma; entonces, afuera, los ánimos comenzaban a subir de temperatura, y empezó el sonar de bombos, redoblantes y cornetas, y con un altavoz, Héctor López Auil, comenzaba a expresar consignas contra el Gobierno provincial y los dirigentes que participaban de la reunión y hacia saber los dichos de Álvarez.
Fue entonces cuando los dirigentes de La Bancaria y de Luz y Fuerza, se retiraron de la reunión en solidaridad con los gremios a los que no se les permitía ingresar a la reunión.
Paralelamente en el exterior, llegaban unos 50 efectivos de la División Servicios Especiales y de la Comisaria Tercera, parte de ellos se ubicaban frente al acceso al quincho, y otros quedaban en la esquina a unos 50 metros.
Las idas y venidas de los funcionarios permitió que los dirigentes y militantes fueran ganando espacio en el interior de la sede de ATSA, hasta quedar cara a cara con los policías de civil que impedían el acceso al quincho, por lo que pidieron refuerzos ingresando unos 5 policías, y dos funcionario policiales, viviéndose un momento de gran tensión.
Antes de esa circunstancia, el Dr. Álvarez dijo, “ya vuelvo, voy a consultar como seguimos”, y como era de esperar, no regresó más ni él, ni Ledesma, ni D’angelo.
El último momento de tensión se dio cuando los dirigentes de ATE, acompañados de varios militantes, se retiraron del lugar por la puerta del quincho, flanqueados por policías, en medio del reproche de los militantes de la Unión de Gremios. Varios dirigentes, entre ellos López Auil y Horacio Catena, tuvieron que intervenir para que la situación no pasara a mayores ante la pasividad de la policía, que no se desentendía de custodiar desde el exterior el recinto de la reunión.
Pasó la “reunión” del Gobierno y algunos gremios en una Mesa Técnica para tratar la sustentabilidad del sistema previsional. La Unión de Gremios y Jubilados Estatales de Tierra del Fuego no fue parte de la misma porque el Gobierno NO QUISO !.
La Bancaria, y Luz y Fuerza, se retiraron de la reunión por no permitirse la “participación amplia” como había anunciado el Dr. Gastón Díaz; en tanto, el Ministro de Gobierno, sumó dos nuevas entidades docentes a la Mesa de Diálogo: la UDA y AMET.
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