JUEVES, 14 de mayo 2015.- En horas de la mañana del miércoles, un grupo de padres auto-convocados se acercaron a la sede del SUTEF, para consultar los motivos por los cuales sus hijos están sin recibir clases. Dirigentes del Sindicato les explicaron a los padres cada cuestionamiento ya que los mismos estaban confundidos por explicaciones erróneas dadas por el Gobierno con respecto a leyes y homologaciones paritarias.
Se les explicó que el ítem “material didáctico” forma parte de nuestro salario y que el 30 de abril venció el plazo de pago (dado que debe pagarse dentro del primer cuatrimestre del año), lo que habilita a cada docente a retener sus servicios. Y se les aclaró que hay incluso más de 1200 docentes que no solo no han percibido el material didáctico, sino tampoco la totalidad de su salario. Además se mencionó que los equipos jerárquicos no recibieron el aumento acordado en la grilla firmada por la Ministra Sandra Molina, quien no cumple lo que firma.
También se les explicó el porqué de la falta de credibilidad que tienen los docentes con este Gobierno y que motiva que los docentes continúen con la retención hasta que paguen. Se mencionó entonces el mal trato que los docentes reciben por parte de este Gobierno mes a mes, recordando que en febrero (período de vacaciones), pese a tener un cronograma de pago correcto, se pagó fuera de los plazos establecidos por ley; que el sindicato debió realizar amparos en el mes de enero para poder percibir el aguinaldo, como para citar algunos ejemplos del accionar de este gobierno.
Con respecto a la participación de los padres en las reuniones paritarias se les comentó que no había inconvenientes en que ellos pudieran participar ingresando y escuchando durante las mesas de negociación, simplemente que no podrían tener decisión en cuestiones que atañen al salario docente por no ser parte. Pero se les aclaró que quienes mantienen las puertas cerradas al público en las negociaciones, son los paritarios del ejecutivo y no los docentes.
También pidieron a este sindicato garantías de que sus hijos van a tener clases y que los problemas van a finalizar, una vez abonado el ítem en cuestión. Con respecto a este punto se les aclaró que no está en manos de nuestra entidad garantizar el normal dictado de clases. No es el sindicato quien decide no abonar en tiempo y forma o realizar descuentos de manera ilegítima, sino el Gobierno; ni es el sindicato quien debe garantizar que a las escuelas se les hagan las refacciones necesarias para que los edificios colapsen.
El sindicato tiene como misión, defender los derechos de los trabajadores y luchará con las armas que sean necesarias según la situación, cada vez que sea necesario. De más está decir que también se les planteó a los padres que el deseo de este sindicato, al igual que el de ellos, es que cada docente pueda estar en las aulas dictando clases, porque eso significaría que se han resuelto todos los conflictos.
Finalmente se les ofreció copias de todas las actas y documentos que ratificaban los dichos del sindicato. Los padres manifestaron conformidad con esto debido a que no pudo ofrecerles el ejecutivo ningún documento, ni siquiera número de decreto, sobre lo que hacían referencia. Además aclararon que no están en contra de los docentes ni de este sindicato, sino que simplemente desean que sus hijos tengan clases.
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